Clara Campoamor (1888-1972) fue una política española defensora de los derechos de la mujer. Nació en Madrid, en el seno de una familia trabajadora. Pronto empezó a trabajar, hasta que consiguió un puesto de funcionaria en Correos. Más tarde, pasó a ser secretaria del director de la revista "La Tribuna", donde conoció a mucha gente y empezó a interesarse por la política. Así, en 1920 se matriculó como estudiante en la escuela secundaria y dos años más tarde, en la Facultad de Derecho. Así, a los 36 años se convierte en una de las pocas abogadas españolas ejerciendo su profesión. Desde siempre defendió la igualdad y los derechos de la mujer, lo que la acercaron al Partido Socialista Obrero Español (PSOE), aunque nunca aceptó unirse a él pues se oponía a la colaboración de este partido con la dictadura de Primo de Rivera. Sin embargo, sí mantuvo una gran actividad como conferenciante en la Asociación Femenina Universitaria y en la Academia de Jurisprudencia.
Mientras seguía ejerciendo como abogada llevando casos cada vez más importantes, siguió sumergiéndose en política, por lo que tras la proclamación de la Segunda República, Clara Campoamor fue elegida diputada por el Partido Republicano Radical de Alejandro Lerroux. Formó parte de la Comisión Constitucional donde luchó para establecer la no discriminación por razón de sexo, la igualdad jurídica de los hijos e hijas habidos dentro y fuera del matrimonio, el divorcio y el sufragio universal. Consiguió todo, excepto lo relativo al voto, que tuvo que debatirse en el Parlamento.
La mayoría de los partidos de izquierdas se oponían al voto femenino, pues consideraban que darle el voto a la mujer, suponía dárselo a la Iglesia, es decir, a la derecha. Otra diputada, Victoria Kent, del Partido Socialista Radical, se enfrentó a Clara, pero finalmente ésta consiguió la mayoría parlamentaria, logrando la aprobación del sufragio femenino.
En 1933 no renovó su escaño y al año siguiente abandonó el partido por su subordinación a la Confederación Española de Derechas Autónomas (CEDA). Ese mismo año intentó unirse a Izquierda Republicana pero no la admitieron. Al estallar la Guerra Civil se exilió a París, pero después viajó a Argentina, donde pasó varios años. Tras intentar volver a España y no poder por estar procesada por masona, se trasladó a Suiza, donde siguió desempeñando su profesión como abogada y donde murió de cáncer en 1972.
Tras la Transición y la llegada de la democracia a España, se han llevado a cabo varios homenajes en memoria de Clara. Además, recientemente, Televisión Española, la cadena pública, ha emitido la película "Clara Campoamor, la mujer olvidada", siendo la actriz Elvira Mínguez la encargada de interpretar a estar importante mujer.
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