Personaje: Jesús de Nazaret

Jesús de Nazaret (0-33 aprox) es la figura principal del cristianismo, quien, según la Iglesia Católica, es el Hijo de Dios que vino a salvar a la humanidad del pecado. Siguiendo la visión cristiana, su madre fue María, que quedó embarazada por obra del Espíritu Santo tras la Anunciación del arcángel San Gabriel comunicándole que ella sería la madre del Mesías esperado por los judíos. José, el marido de María, se convirtió en el padre putativo del niño. Durante el viaje a Belén, nace Jesús y unos Magos de Oriente, guiados por una estrella acuden a adorarlo.
El monarca Herodes, enterado del nacimiento del "rey de los judíos" iniciará una persecución, pero José será alertado por los ángeles y huirá con su familia a Egipto. Tras la muerte de Herodes, podrán volver a Nazaret, en Galilea.
Jesús fue bautizado en el río Jordán por su primo Juan el Bautista y a continuación se dirigió al desierto, donde ayunó durante cuarenta días y se enfrentó a las tentaciones del Demonio.
Volvió a Galilea y comenzó a predicar la llegada del Reino de Dios. Eligió a sus principales seguidores, los Doce Apóstoles: Simón Pedro, Juan, Santiago el Mayor, Andrés, Felipe, Tomás, Judas Tadeo, Simón el Zelote, Mateo, Santiago el Menor, Bartolomé y Judas Iscariote. Jesús predicó a lo largo de su vida, utilizando a menudo parábolas, como la del samaritano o la del hijo pródigo. Jesús fue muy cercano a las mujeres y algunas como María Magdalena, Salomé o Juana se convirtieron en fieles seguidoras suyas. Con los fariseos, sin embargo, mantuvo fuertes tensiones. También son muy conocidos los milagros que realizó, desde cura de enfermedades o resurrecciones hasta exorcismos.
Predicó en Jerusalén y en el templo de esta ciudad. Allí cenó con sus Apóstoles en la conocida como Última Cena, donde repartió el pan y el vino (precedente de la eucaristía actual) y predijo que sería traicionado por uno de sus Apóstoles. Tras la cena, Jesús y sus discípulos fueron a orar el huerto de Getsemaní, pero los Doce se quedaron dormidos y Jesús sufrió por su destino, pero acató la voluntad de Dios. Judas Iscariote fue el que traicionó a Jesús a cambio de treinta piezas de plata. Cuando acudieron a detenerle, Judas reveló la identidad de Jesús dándole un beso en la mejilla. Tras un forcejeo, los Apóstoles huyeron y Jesús fue detenido. Fue llevado ante el sumo sacerdote Caifás y fue juzgado ante el Sanedrín. Él mismo reconoció que era el Mesías, por lo que fue cruelmente torturado. A la mañana siguiente fue presentado ante el procurador romano Poncio Pilato, que no lo encontró culpable pero se lavó las manos cuando la muchedumbre decidió condenarlo y liberar, sin embargo, al conocido bandido Barrabás. Se le colocó una corona de espinas en la cabeza y fue obligado a portar la cruz en la que sería crucificado hasta el Gólgota. A lo largo del camino fue sometido a burlas. Conocidas son las figuras de Simón de Cirene, que le ayudó a llevar la cruz cuando Jesús no podía más, y de Verónica, que le tendió un paño para enjugarle el sudor y la sangre. En la tela quedaron impresas las facciones de Jesús.
Fue crucificado entre dos ladrones, y sobre su cabeza colgaron la inscripción "Jesús de Nazaret, Rey de los Judíos", que se suele representar como INRI ("Iesus Nazarenus Rex Iudaeorum"). Jesús exclamó a su padre "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?". Los que le acompañaron en sus últimos momentos, a los pues de la cruz, fueron su madre María, María Magdalena y el apóstol Juan. Uno de sus seguidores, José de Arimatea, solicitó el cuerpo de Jesús y tras descenderlo de la cruz, fue envuelto en una sábana y enterrado en un sepulcro excavado en la roca.
Al tercer día, María Magdalena acudió al sepulcro con aromas, pero el cuerpo no estaba, entonces se le apareció Jesús, en carne y hueso, le comunicó que había resucitado y le pidió que se lo dijera a los demás, que estaban escondidos por miedo a represalias. La mujer corrió a comunicarles lo ocurrido, pero no le creyeron. Entonces, Jesús se apareció ante ellos y le mostró las llagas de sus manos y pies. Jesús había resucitado y ascendería a los cielos, donde está sentado a la derecha de Dios. Entregó a Simón Pedro las llaves del Reino de los cielos. "Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia". Así empezó la Iglesia Católica, siendo Pedro el primer Papa que junto al resto de apóstoles y seguidores de Jesús, tras la fuerza que les otorgó el Espíritu Santo, predicaron la Palabra y el Reino de Dios.

La figura de Jesús ha sido ampliamente estudiada. Como se ha indicado, es la figura principal del cristianismo, la principal religión del mundo, pero también ha influido de determinante manera en otras como el judaísmo y el islam. En el arte, se le ha representado siguiendo las palabras de la Biblia, el libro sagrado del cristianismo, en diversos capítulos de su vida. Respecto al espectáculo, también se ha representado su vida como teatro musical, en la conocida obra "Jesucristo Superstar" y en la cine cabe destacar la polémica película de Mel Gibson "La Pasión de Cristo", siendo el actor James Caviezel el encargado de interpretar a tan importante personaje.